Una nueva polémica envuelve a Guns N' Roses, luego de que su exmánager —quien trabajó con la agrupación durante algunos de sus años más turbulentos— interpusiera una demanda asegurando que la banda le impidió publicar un libro donde narraba su experiencia profesional con ellos.

Según los documentos presentados ante la corte, el exrepresentante acusa al grupo de obstruir la publicación al argumentar que el manuscrito incluía información protegida por acuerdos de confidencialidad firmados durante su etapa como parte del equipo. De acuerdo con la demanda, el libro llevaba más de un año terminado y estaba listo para impresión cuando recibió un aviso legal para detener su lanzamiento.

El denunciante afirma que su obra no revelaba secretos comerciales ni datos sensibles, sino anécdotas y reflexiones sobre su carrera en la industria musical.

“Mi intención nunca fue perjudicar a nadie, solo contar mi historia con honestidad”, declaró en un comunicado difundido por su representación legal.

“Lo que viví junto a la banda es parte de mi vida profesional, y tengo derecho a compartirla.”

Por su parte, fuentes cercanas al entorno de Guns N' Roses habrían expresado que la banda considera que el manuscrito contiene detalles privados, discusiones internas y materiales que fueron obtenidos bajo acuerdos estrictos.

“La protección de la privacidad del grupo es prioritaria, así como el respeto a los contratos firmados”, señalaron dichas fuentes.

El conflicto resurge en un momento en el que la banda mantiene una agenda activa de conciertos internacionales, por lo que la demanda podría generar un nuevo foco mediático alrededor del grupo.

¿Por qué este caso ha generado tanto ruido?

Porque los libros escritos por exmánagers suelen revelar momentos desconocidos del mundo del rock.

Porque Guns N' Roses es una banda históricamente rodeada de controversias internas.

Porque el caso abre un debate sobre los límites entre la libertad de contar una experiencia personal y la obligación legal de respetar acuerdos confidenciales.

Expertos en propiedad intelectual explican que este tipo de casos suele resolverse dependiendo de qué tanto del contenido del libro pueda considerarse “material reservado”, algo que solo los jueces pueden determinar.

Mientras tanto, el exmánager sostiene su postura y asegura que no retirará la demanda:

“Confío en que la verdad y la libertad creativa prevalezcan.”

Por ahora, la publicación del libro permanece en pausa a la espera de una resolución judicial.