La batalla legal entre Justin Baldoni y Blake Lively se intensifica. Una nueva declaración jurada presentada en septiembre complica aún más el caso: un testigo no identificado asegura haber sido víctima de “comportamiento negativo repetido” y “abuso verbal” por parte de Baldoni durante una producción diferente. Según el documento, la conducta fue tal que esta persona fue excluida del set y se le pidió que Baldoni no participara ni en las labores de marketing ni en relaciones públicas del proyecto. Aunque no se vincula directamente con It Ends with Us, estas declaraciones se suman al contexto que ya enfrenta Baldoni. Este testigo podría testificar en el juicio programado para marzo de 2026. 

Todo esto se da en medio de la demanda original por acoso sexual y represalias presentada por Blake Lively en diciembre de 2024, que ya había sido reforzada con nuevas acusaciones el pasado febrero. En esa demanda enmendada, Lively señala que al menos dos coprotagonistas femeninas de la película It Ends with Us están dispuestas a declarar sobre conductas inapropiadas atribuidas a Baldoni. 

Por su parte, el contador de Baldoni por difamación y extorsión por $400 millones contra Lively y su esposo Ryan Reynolds fue desestimado en junio, aunque con posibilidad de reescribir algunos reclamos contractuales. 

En paralelo, Blake Lively añadió a su demanda una nueva acción pidiendo indemnización multimillonaria por daños emocionales causados por Baldoni durante y después del rodaje. Apela a una ley californiana que protege a las víctimas de represalias y exige una compensación resarcitoria y daños punitivos. 

Con este panorama, sumando el nuevo testigo, el respaldo de actrices dispuestas a testificar y el refuerzo legal, el juicio se vislumbra cada vez más complejo. El impacto mediático también crece mientras las partes se preparan para el juicio previsto en marzo de 2026.