Esta madrugada del 10 de diciembre de 2025 se confirmó la muerte de Robe Iniesta, histórico vocalista, compositor y figura central de Extremoduro.

Robe tenía 63 años. Su sello discográfico emitió un comunicado lleno de tristeza: “hoy despedimos al último gran filósofo, al último gran humanista y literato contemporáneo de lengua hispana, y al cantante cuyas melodías han conseguido estremecer a generaciones y generaciones” para resaltar la magnitud de su legado.

Su salud había comenzado a deteriorarse desde noviembre de 2024, cuando un diagnóstico de tromboembolismo pulmonar obligó a cancelar de urgencia los conciertos de su gira “Ni santos ni inocentes” y a someterse a un estricto reposo absoluto.

A lo largo de más de tres décadas, Robe Iniesta construyó una carrera cimentada en la honestidad, la rebeldía y la poesía. Desde los inicios de Extremoduro en 1987 hasta su etapa solista, su legado musical trascendió generaciones.

Muchos medios y colegas han reaccionado con mensajes de admiración y dolor. Su partida marca “el final de una era”: un artista irrepetible, cuya voz y letras fueron y serán bandera del rock en español.

El impacto de su muerte todavía se siente en la comunidad artística y entre sus seguidores. En los próximos días, se anunciará en su tierra natal Plasencia (Cáceres, España) el homenaje oficial para despedir a uno de los grandes del rock.