
El origen del jazz: de Nueva Orleans al mundo
Cómo un crisol de culturas dio vida a uno de los géneros más influyentes de la historia.

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El jazz nació a finales del siglo XIX en Nueva Orleans, una ciudad vibrante donde se cruzaban ritmos africanos, cantos espirituales, blues y marchas europeas. Esta mezcla única de culturas se convirtió en un lenguaje musical lleno de improvisación, energía y libertad.
A diferencia de otros géneros más rígidos, el jazz se caracteriza porque cada interpretación es irrepetible: los músicos dialogan entre sí en tiempo real, creando un “conversar” sonoro. Con el paso del tiempo se expandió a ciudades como Chicago y Nueva York, donde surgieron grandes figuras como Louis Armstrong, Duke Ellington y más tarde, íconos como Miles Davis y John Coltrane.
Hoy, el jazz no es solo un género, es un símbolo de creatividad y expresión artística. Y aunque muchos lo asocien con música “de culto”, su influencia está presente en el pop, el rock, el hip-hop y hasta en el cine.
👉 Dato curioso:
El jazz fue declarado por la UNESCO como “patrimonio cultural de la humanidad” y hasta tiene su propio día internacional: el 30 de abril.

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