Jamie Lee Curtis casi conoció a la Princesa Diana: un descanso al baño lo impidió
Con motivo del 28 aniversario de la muerte de la princesa Diana, Jamie Lee Curtis reveló una anécdota poco conocida. La actriz estaba en su camerino cuando Diana llegó al set, pero ese breve momento cambió el destino de un encuentro inolvidable.
El giro inesperado que impidió que Jamie Lee Curtis conociera a la princesa Diana.
Monterrey, Nuevo León
En 1995, mientras filmaba la comedia Fierce Creatures en los estudios Pinewood de Londres (la secuela de A Fish Called Wanda), Jamie Lee Curtis recibió la noticia de que la Princesa Diana planeaba visitar el set junto a sus hijos, los príncipes William y Harry.
Curtis detalló que justo en ese momento tomó un descanso para ir al baño, subiendo a un “golf cart” para trasladarse a su camerino. Unos instantes después, su chofer le avisó que Diana había llegado, y cuando regresó, la princesa ya se retiraba. “Cuando volví… ella ya se marchaba”.
Con pesar por la oportunidad perdida, Jamie escribió una carta al Palacio de Kensington expresando su admiración y lamentando el mal timing:
“Lo siento mucho por no haber podido conocerte… la naturaleza me llamó… lo siento y solo pienso que eres increíble. Con mis mejores deseos, Jamie.”
Sorprendentemente, Diana respondió al día siguiente con una carta empática:
“Siento mucho no haber podido conocerte también. Te admiro, y entiendo perfectamente cuando la naturaleza nos llama. Claro que deberías elegir eso. Espero que tengamos la oportunidad de conocernos. Siempre con mis mejores deseos.”
Trágicamente, Diana falleció apenas dos meses después —el 31 de agosto de 1997— en un accidente automovilístico en París junto a Dodi Fayed y su chofer.
Este episodio dejó una huella profunda en Jamie. En una emotiva publicación en Instagram, recordó que tras enterarse de la muerte de Diana, recurrió a una lectura sobre meditación consciente, donde encontró preguntas que le ayudaron a reflexionar sobre la vida: “¿Viví sabiamente? ¿Amé bien? Inmediatamente pensé en la princesa Diana y en su proceso de aprender a vivir con sabiduría. En cómo salió de ese matrimonio falso y lleno de apariencias, en cómo habló abiertamente sobre sus problemas personales y demostró valentía y compasión: cuando puso su mano sobre la pierna de un joven con VIH/SIDA, cuando caminó por una mina terrestre. Yo sentí, sin duda, que ella había aprendido a vivir sabiamente”.
Esa introspección destacó en su homenaje a Diana, reconociendo sus virtudes de valentía, autenticidad y compasión.
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